El 29 de Mayo cerraba una de las últimas minas turolenses de interior: mina María. El imparable avance de la Corta Santa María acabará por destruir las labores subterráneas, ya que las capas más profundas, por debajo incluso del nivel de la corta, han sido ya extraídas. Se cierran así 36 años de explotación por parte de SAMCA, propietaria de la mina, que seguirá con la extracción de lignito mediante la mencionada corta y su otra mina de interior, la Sierra de Arcos.
Los trabajos comenzaron en 1973, extrayéndose entonces ya 31.000 toneladas de carbón, con una plantilla de 65 trabajadores. El método de extracción empleado ha sido el de sutiraje de niveles con minador de ataque puntual, empleándose primeramente rozadoras PK-7 rusas, siendo sustituidas más tarde por las PK-3. Consta de dos planos inclinados, separados entre si por unos 30 metros, alcanzándose la profundidad de 347 metros desde la cota de entrada, con 7 plantas.
La plantilla de trabajadores se ha visto permanentemente afectada por los vaivenes de la explotación. Así, en 1993 eran 117 los mineros empleados en ella, siendo, en cambio, en 1996, 130 el número de trabajadores. Todos los mineros afectados por el cierre pasaron a prestar servicio en la vecina mina Sierra de Arcos a partir del día 1 de Junio.
Respecto a la producción obtenida, diremos que ha oscilado entre 260.000 a 300.000 toneladas anuales de carbón vendible, lográndose un record absoluto en 1994, con 306.047 toneladas. Mina María fue, sin duda alguna, extraordinariamente rentable.
Creemos que las instalaciones de esta emblemática mina difícilmente podrán ser preservadas, ya que la corta acabará por devorarlas, pero bueno sería que la empresa propietaria hiciese un esfuerzo por salvaguardar parte de ese valioso patrimonio.
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Informa: Antonio Pizarro
Fotografía: Óscar
Datos históricos extraídos del libro de Pedro Alcaine Ariño y su carbón.