El pozo se encuentra en la Dehesa de las Yeguas, dentro del término municipal de Bailén, y la concesión San Apolo 1º y 2º, sobre la que esta ubicado fue denunciada por vez primera en 1861. En 1880 se hizo cargo de la misma la Sociedad La Inocencia, pasando en 1890 a ser propiedad de Hijos de Manuel Heredia, hasta que en 1920 se hizo cargo de la misma la Cía. la Cruz. Su explotación finalizó en 1991, cuando el pozo tenía ya la profundidad de 510 metros.
San José es el más claro exponente de lo que NUNCA debe hacerse. Su castillete metálico, que contaba con otro auxiliar de una sola polea, fue arrancado de su emplazamiento y trasladado a una rotonda de Linares, quedando el auxiliar abandonado a su suerte en la plaza de la mina. Las instalaciones anexas han venido padeciendo un continuo expolio y destrucción, y el deplorable estado en que actualmente se encuentran auguran un final tan próximo como lamentable. Era una instalación singular, única, que debió preservarse a toda costa, en lugar de destinarla al ornato de una ciudad en la que algunos parecen obstinados en olvidar cuanto antes su noble pasado minero.
El reportaje fotográfico que acompañamos, obra de J.M. Sanchis y Álvaro Gómez pone de manifiesto el proceso destructivo llevado a cabo sobre tan histórica explotación.
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