La Empresa Nacional Adaro comenzó su actividad en el distrito de Linares en 1949, tras serle adjudicadas por el Estado las reservas de plomo de la zona. El grupo Siles, con sus diversos pozos, fue una de las grandes concesiones explotadas por ellos.
En 1958 construyeron en las inmediaciones del pozo A, situado en el paraje conocido como Matacabras, un lavadero de concentración gravimétrica, muy próximo también a los pozos Malacate, Templo y San Juan, todos ellos dentro del término municipal de Bailén. Este lavadero estaba diseñado para tratar unas 250 toneladas/día de mineral, obteniéndose tres productos bien diferenciados: concentrados, mixtos y estériles. Posteriormente, en 1971, y con el fin de abaratar costos, se levantaría junto a éste lavadero una planta de flotación, eliminándose así el antiguo lavadero de flotación que existía entre los pozos B y F, demasiado alejado ya de los puntos de extracción.
Todas las instalaciones serían abandonadas en 1986. De ellas solo se conservan en la actualidad los basamentos de la maquinaria, tolvas y alguna construcción auxiliar en estado de absoluta ruina.
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