Evocadoras imágenes de un tiempo pasado. Grupos de mujeres (solo en una de las fotografías aparecen hombres realizando tal labor), pertrechadas con bateas y palanganas, batean en los arroyos próximos a la Sierra de San Cristóbal en busca del preciado y valioso estaño.
Las instantáneas fueron captadas entre 1951 y 1953, la mayor parte de ellas en el barranco Barrero, de Logrosán (Cáceres). El lavado de aluviones ha sido práctica habitual durante muchísimos años entre los habitantes de poblaciones extremeñas como Logrosán, Mérida, Trujillo, Almoharín, Arroyomolinos, Montánchez etc., constituyendo, para muchos, un auténtico medio de subsistencia.
La presencia de mujeres bateando se justifica como una contribución necesaria a la paupérrima economía familiar. Mientras que los hombres llevaban a cabo trabajos agrícolas o mineros, estas colaboraban dedicándose a la búsqueda de mineral en el escaso tiempo libre que les dejaban sus obligaciones domésticas, en una época dónde el estaño alcanzaba precios ciertamente elevados.
Para acceder, click en las fotos.