Los orígenes de las antiguas bocaminas que compusieron el grupo Sotón de montaña posiblemente se remonten a 1792, si bien sería Guillermo Partington el que las denunciaría en 1845, para más tarde traspasarlas a la Compañía Cantábrica, quien a su vez vendería sus pertenencias a la sociedad francesa Hulleras de Santa Ana.
En 1888 pasarían a ser propiedad de Herrero Hermanos, y sobre 1904 serían adquiridas por la Sociedad Metalúrgica Duro Felguera. En 1914, esta empresa comenzaría la perforación del pozo vertical Sotón, concluyéndolo en 1921, y abandonándose por tanto las explotaciones de montaña.
La Generala fue remodelada en 1934, fecha que aparece en la piedra de clave, empleándose para la entrada de obreros, animales de tiro y madera hasta mediados de los años 50 del siglo XX. Se trata de un pozo plano que desciende, tras un recorrido de decenas de metros, hasta enlazar con el piso 1º del pozo Sotón, y que ejerció funciones de ventilación del pozo gracias al potente ventilador instalado junto a la bocamina.
HUNOSA se haría cargo de todas las explotaciones de Duro Felguera en 1967.
La bocamina se encuentra situada junto a la carretera AS-17, perfectamente señalizada.
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