Enclavada en el barranco de El Francés, en plena Sierra Almagrera. Tuvo como colindantes a las minas Justicia, Mesías, Campohermoso y Teodolinda, y fue registrada en la segunda mitad del siglo XIX por Juan Canals, vecino de Madrid, otorgándosele el número de registro 225. Ocupó esta pertenencia algo más de una hectárea. Lindaba igualmente con Observación a Casta Diva y su demasía, del mismo propietario, con números de expediente 754 y 4093, respectivamente.
Como suele suceder con las minas de la zona, apenas quedan restos visibles de sus instalaciones. En este caso se mantienen en pie los cuatro muros que albergaron a la máquina de extracción, los muros de hormigón que sostuvieron el castillete, un par de edificios pertenecientes a la mina y una pequeña escombrera.
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