Tras el cierre de la minería de interior en La Serrana, se iniciaron los trabajos a cielo abierto en la mina Ernesto Ferrer (nº 2752), que ocupaba gran parte de la concesión de aquella, dónde se ubicaba la Mina Vieja, y cuyo plano inclinado fue prácticamente destruido por la nueva corta. La concesión fue otorgada el 2 de noviembre de 1986, junto a la Ampliación a Ernesto Ferrer (nº 2765). Su extensión era de 102 hectáreas.
La empresa propietaria de todas estas explotaciones, Minas Palomar S.A., mantuvo los trabajos hasta 1995, año en que se dio por finalizada la extracción de lignito, si bien una empresa catalana, Carbones Vilardell, aún permaneció un par de años extrayendo carbón de la corta. La Demasía a Ampliación de Ernesto Ferrer se registraría en junio de 1996, para poder prolongar estos últimos trabajos.
El emboquille del plano inclinado de la Mina Vieja, que se mantenía en relativo buen estado, se hundió recientemente, y lo poco que resta de la mina La Serrana pronto habrá desaparecido también.
Tanto las instalaciones de la mina de interior como la corta se encuentran a menos de 800 metros del casco urbano de Palomar de Arroyos, junto a la carretera A-2402, en dirección a Escucha.