La riqueza carbonera del Valle de Samuño era conocida ya en el siglo XVIII, si bien su explotación a gran escala comenzaría a partir de mediados del XIX. La Trechora comenzó a trabajarse por la compañía Sociedad Minero-Cántabra por aquellas fechas, pasando a pertenecer poco después a Hulleras de Santa Ana, empresa que tras su quiebra fue comprada por Herrero Hermanos, dándole el nuevo nombre de Carbones de Santa Ana.
Los hermanos Herrero fueron los que construyeron el ferrocarril minero que enlazaba sus explotaciones de Sotón y Santa Ana, en el municipio vecino de San Martín, y de Tras el Canto, al comienzo del Valle de Samuño, con la mina La Trechora.
Mina La Trechora
Restos del tendido ferroviario en la salida de la mina (Fot. J.M. Sanchis, 2011)
AccederA comienzos de 1902, la empresa fue adquirida por Duro Felguera, que intensificó la actividad extractiva de aquellas minas durante algunos años más. La Duro quedó integrada en HUNOSA en 1967, concluyéndose toda actividad minera en el valle con el cierre del pozo Samuño en 2003.
De La Trechora se ha conservado su bocamina y el falso túnel que se construyó para crear la plaza de la mina, dónde se efectuaban maniobras y otros trabajos.