Pozo Esperanza, El Terronal, La Peña, Mieres, Asturias

viernes, 26 de abril de 2013

Pozo Esperanza

Castillete del pozo Esperanza (Fot. J.H. Velasco, 2008)

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La concesión de mercurio La Esperanza (nº 312) fue demarcada en junio de 1844 por la Sociedad Minera La Fraternidad, abriéndose para su laboreo un socavón llamado Galería Schulz, llamado también socavón Esperanza, y algo más tarde la galería Flecha, conectándose todos estos pisos mediante pozos interiores.

Pozo Esperanza

Embarque (Fot. J.H. Velasco, 2008)

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En 1846, las labores pasaron a ser propiedad de la Sociedad El Porvenir, quien se encargaría de reprofundizar entre 1872 y 1875 los obsoletos pozos Unión, Peña y Esperanza. Las propiedades pasarían en 1909 a pertenecer a The Oviedo Mercury Mines, y en 1913 a Policarpo Herrero.

Pozo Esperanza

Interior de la casa de la máquina de extracción (Fot. E. Pérez, 2013)

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En 1947 se creó la Sociedad Astur Belga de Minas, que se ocupó de la recuperación de labores abandonadas en aquel sector. Hacia 1952, los pozos Unión y Esperanza quedaron enlazados mediante galerías subterráneas, y en 1959 se instaló el nuevo castillete del pozo Esperanza, de 15,5 m de altura hasta el eje de poleas, sobre un pozo de sección circular hormigonada, de 3,25 m de diámetro, que llegó a alcanzar la profundidad de 190 metros, disponiendo de tres plantas.

Pozo Esperanza

Ventanal en el laboratorio (Fot. E. Pérez, 2013)

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El nuevo castillete, de perfiles laminados, estaba servido por una máquina de motor eléctrico de 135 CV, con dos jaulas con capacidad para una sola vagoneta de 950 litros cada una de ellas, con guionaje sistema Briart.

Pozo Esperanza

Acciones abandonadas en las oficinas (Fot. J.H. Velasco, 2008)

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Junto al pozo se instaló una planta de destilación para la obtención de mercurio, cuyo primer horno rotatorio comenzó a funcionar en 1960, añadiéndose un segundo en 1966, al tiempo que se modernizaron los métodos de extracción y de trituración. En aquella época, era obligatorio que todo el mercurio obtenido fuese vendido a Minas de Almadén.

Pozo Esperanza

Cámaras de condensación del Hg (Fot. J.H. Velasco, 2013)

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Minas e instalaciones fueron cerradas en 1974, cuando contaba con tres hornos en marcha, dos rotativos y uno tipo Herreshoff. Uno de los hornos rotativos sería adquirido, tras el desmantelamiento de la planta, por la R. Cía. Asturiana de Minas para ser empleado en la metalurgia del cinc en una de sus plantas.

Las fotografías con las que ilustramos esta entrada fueron tomadas en tres épocas distintas, por J.M. Sanchis (2006), Jose Hortensio Velasco (2008) y Emilio Pérez en 2013.