Cargadero del ferrocarril minero Bédar-Garrucha
Muro frontal del cargadero, visto desde la rotonda de la carretera (Fot. J.M. Sanchis, 2013)
AccederTras la adquisición por parte de Víctor Chávarri en 1894 de las minas de hierro de Bédar, se proyectó un trazado de ferrocarril que llevase los minerales hasta la costa, para su transporte en buques. La línea, de 17,5 kilómetros, unía el cargadero de la mina Tres Amigos de Bédar con la terminal de descarga levantada en la playa de Garrucha.
Cargadero del ferrocarril minero Bédar-Garrucha
Entorno del cargadero, recientemente restaurado (Fot. J.M. Sanchis, 2013)
AccederDicho cargadero era un gran terraplén sobre el que se emplazó un puente metálico por el que circulaban los vagones, que vertían su carga a ambos lados del mismo. Tenía una capacidad de 12.000 toneladas. Una vez almacenado el mineral, era cargado en vagonetas y llevado hasta dos pequeños muelles dónde era transportado en barcazas.
Cargadero del ferrocarril minero Bédar-Garrucha
Mineral de hierro recogido en el cargadero (Fot. J.M. Sanchis, 2013)
AccederLa sociedad de Chávarri mantuvo el servicio, con grandes altibajos, hasta que en 1916 se fusionó con otra sociedad, creándose entonces la Unión Bedareña. La crisis del hierro de los años 20 afectaría en gran manera a todas aquellas minas: el ferrocarril se detuvo en 1923 y no volvió ya a funcionar, permaneciendo abandonada tanto la línea como el cargadero hasta después de la Guerra Civil. En 1942 se desmantelaron las vías y se vendió todo el material móvil.
Cargadero del ferrocarril minero Bédar-Garrucha
Mineral de hierro en la playa, frente al cargadero (Fot. J.M. Sanchis, 2013)
Acceder