Hasta mediados del siglo XIX, la explotación del carbón en esta zona se efectuaba mediante minas de montaña, pero ante el agotamiento de estas pronto surgió la necesidad de buscarlo en capas más profundas. Para ello, hacia 1874, la Sociedad Esperanza de Reinosa perforó dos pozos maestros, llamados Jovita y Rafael, de 78 y 112 metros de profundidad, respectivamente.
Minas de Orbó: Pozo Rafael
Piedra de clave con acrónimo de la Sociedad Esperanza de Reinosa (Fot. A.M. Fernández, 2013)
AccederPara afrontar el problema que generaban las aguas, se ideó un sistema pionero tanto en España como en el resto del mundo: abrir un canal que, además de emplearse para el desagüe, sirviese como vía de transporte y de ventilación. Las obras se llevaron a cabo entre 1879 y 1884, bajo la dirección de Mariano Zuaznávar, quien también estaba al frente de aquellas minas. El túnel tenía 1775 metros de longitud y una sección de 2,5 m, para que pudieran navegar por él las gabarras, de 10 metros de largas y 1,7 de anchas, movidas a mano en un principio y mediante un cable tractor más tarde.
Minas de Orbó: Pozo Rafael
Cierre de la galería de acceso al nivel San Ignacio (Fot. A.M. Fernández, 2013)
AccederAquella obra supuso un enorme fracaso que trajo consigo la desaparición de la empresa, desecándose el canal para convertirlo en un socavón general de acarreo convencional a sangre.
En 1909, la Sociedad Carbonera Española, propiedad del Marqués de Comillas, se hizo cargo de las minas, dándoles un gran impulso hasta que en 1927, Minas de Barruelo adquirió la empresa asturiana, continuando con el laboreo de las minas hasta que en 1966 pasaron a ser propiedad de la Hullera Vasco Leonesa. Sería esta empresa la que comenzaría con la reestructuración del grupo con el cierre de lavaderos e instalaciones. El pozo Rafael fue clausurado en 1969.
A comienzos de los años 80 se reactivaron las explotaciones, y se mantuvieron activas hasta el año 2005. Del pozo Rafael, que se encuentra emplazado justo arriba del transversal San Ignacio, se conserva su castillete de ladrillo y sillería. Del canal únicamente puede verse la parte superior de la arcada, con una piedra de clave donde figura el acrónimo de la Sociedad Esperanza y la fecha de 1883.