Mina da Recheira
Vista de la mina desde ladera NE del Cabeço da Argemela (Fot. Antonio Cruz, 2014)
AccederLa mina de estaño de Recheira se encuentra situada junto al río Zézere, en la ladera NE del Cabeço da Argemela, ya en el concelho de Covilhã, concretamente en la Freguesia de Barco, del céntrico distrito de Castelo Branco. No confundir esta mina con su vecina mina Argemela, también en el Cabeço da Argemela, poco más de 700 m al SW.
Geológicamente nos encontramos en la denominada Zona centro-Ibérica del Macizo Ibérico. La mineralización encaja en los denominados Xistos das Beiras (secuencia Flysch de carácter regional) fuertemente metamorfizada por los granitos hercínicos de la zona.
La región se vio afectada por el plegamiento Sárdico (Cambrico Medio-Cámbrico Superior) dando origen a un plegamiento NE-SW seguido de un metamorfismo regional con esquistos verdes, zona de clorita. Tras la fase de plegamiento se instaló un sistema de venas entrecruzadas de cuarzo de entre 5 y 30 cm de ancho y posición sub-vertical, con casiterita, estannita, calcopirita, arsenopirita, pirita, pirrotina, trifilita y ambligonita. Como secundarios, vivianita y carbonatos.
Catalogada como Patrimonio Geológico de Portugal, las instalaciones de la mina Recheira iban a ser recuperadas como museo local dada la excelente conservación de los recintos mineros y de la maquinaria y demás estructuras de tratamiento del mineral. Como podéis observar en las fotografías remitidas por Antonio Cruz tomadas en abril de 2014, esto ya no será posible debido al total desmantelamiento por robo del abundante patrimonio industrial allí conservado desde finales de la década de los 70 del pasado siglo, fecha en que cesó su actividad.
Mina da Recheira
En la parte superior taller de separación magnética y gravimétrica antes del robo (2012). Abajo, desmantelamiento total de mesas gravimétricas y demás (2014)
AccederEn la fotografía superior se observan las mesas gravimétricas, separador magnético, trituradora manual, etc. tal como se encontraban el pasado 2012. En las dos figuras inferiores se observa el deplorable estado de desmantelación del mismo taller de separación tras el robo.