La minería del mercurio en la zona de Pelúgano, en las estribaciones del macizo de Peña Mea tiene sus orígenes a mediados del siglo XIX, con el registro de la mina Perú. A finales de los años 80 de aquel mismo siglo, se denunciaron varias concesiones por particulares (Juliana, Luisita, Mercedes, Augusto, etc.), que posteriormente fueron arrendadas a la sociedad El Mercurio Asturiano, quien instaló, además, hornos para la destilación junto a las minas. La actividad se mantuvo hasta 1912.
Tras la Guerra Civil se llevaron a cabo algunos intentos de explotación, pero fue en 1955 cuando se reactivaron los trabajos al hacerse cargo de las antiguas concesiones la Astur Belga de Minas, principalmente en la de Monte Vildeo (nº 24044) y Pelúgano (nº 27644). A partir de 1968 se acometió un ambicioso plan de explotación, electrificándose la mina y trabajándose en tres pisos y uno intermedio.
Mina Monte Vildeo
Bocamina del nivel –I, abierta por Astur Belga (Fot. A. Mario Fernández, 2013)
AccederEn 1971, al igual que sucedió con otras minas de mercurio españolas, se detuvo la extracción, para no volverse a retomar jamás. Todas las concesiones de la Astur Belga caducaron en 1999.
En la actualidad pueden verse algunos socavones de antiguas labores en niveles superiores y una bocamina más moderna, a un nivel inferior, así como algunos restos de los hornos y otros edificios mineros en ruinas.