Esta mina de oro (nº 35367) fue registrada, junto a otras, en 1920 por Juan López Soler, y se encuentra en el paraje conocido como Balsa de la Pedrera. A partir de 1925, pasó a pertenecer, junto a Santa Rita y California a la Sociedad Aurífera Minas de Rodalquilar, empresa que en 1930 se transformó en Explotaciones y Minas Auríferas de Rodalquilar (EMARSA). Para la explotación de sus tres filones se abrieron algunas galerías y se perforó un pozo de 60 metros de profundidad.
El mineral era tratado en una planta cercana a la mina, y según Francisco Hernández Ortiz, gran conocedor de la minería rodalquilarense, en 1930 ya se llevaban extraídas 5000 toneladas, con una ley media de 31 gramos por tonelada, de las que se obtuvieron 12 kilos de oro.
Planta y minas cerrarían en 1930, a causa de las dificultades económicas de la empresa explotadora.