En el año 2011 publicamos en nuestra revista digital Hastial un extenso trabajo sobre estas poco conocidas minas de carbón. En él podíamos contemplar las diversas construcciones que conformaron el poblado minero y la bocamina principal. Mal conservadas, pero en pie.
Las minas pasaron en el año 2009 a ser propiedad de la empresa leonesa EMERGICAR S.L. (actualmente en procedimiento concursal y liquidación), quien emprendió la extracción de la hulla mediante labores a cielo abierto, empleando para ello a una sub-contrata y sin respetar el rico patrimonio histórico que allí se encontraba. En mal estado, cierto, pero aún era posible reconocer el cuartelillo de la Guardia Civil, el bar y el horno, las viviendas, las cuadras, el economato, las salas de máquinas o la bocamina. La insaciable voracidad de la empresa lo borró todo del mapa. Nada de ello existe ya.
Aquel hermoso paraje quedó convertido en un desierto, en un muladar, en una escombrera, arrasada la vegetación y las instalaciones mineras. Ha sobrevivido únicamente la gran tolva de mampostería, como triste testigo de semejante tropelía. Todo un detalle por parte de los bárbaros arrasadores.
MTI ha defendido y defenderá siempre la actividad minera, dentro de unos cauces de respeto y sostenibilidad, manteniendo el necesario equilibrio entre explotación y conservación, por lo que nos parece un auténtico crimen el allí perpetrado. El otro crimen de Cuenca.
¿Hacia dónde estaba mirando la anterior corporación municipal, que toleró, consintió y quizá se benefició a título personal de semejante expolio y destrucción patrimonial? ¿Nadie vio lo que allí estaba sucediendo? ¿Las inspecciones de la Jefatura de Minas tampoco observaron nada anormal, ante la “abducción” del poblado? ¿Qué hacían mientras tanto los responsables de EMERGICAR, que en su día se comprometieron a colaborar en la preservación y rehabilitación del conjunto minero? Nadie supo ni quiso reaccionar a tiempo. Poderoso caballero es Don Dinero.
¡Con lo poco que costaba haber incoado un expediente para declarar el conjunto Bien de Interés Cultural! Acertadas eran las palabras escritas en uno de los muros del poblado: "Henarejos, ciudad sin ley".
Incluimos bajo estas líneas una serie de fotografías que nos ha facilitado el Ayuntamiento de Henarejos, a través de su Alcaldesa, Dña. María Isabel Jiménez, en las que se observa con todo detalle el desolador aspecto de la mina y su paisaje, idílico escenario perdido, cuya imagen permanecerá indeleble en la memoria de los que allí vivieron y trabajaron. Apenas nadie ya.
Número de fotografías: 13 (Clic en la foto para ver secuencia)
¿Veremos a los responsables en prisión? Posiblemente, no.