El piso 1º de esta mina se encontraba situado junto al casco urbano de Blimea, donde la empresa Duro Felguera había iniciado los trabajos en 1942. Entre este y el 2º piso se instaló un transportador (“truck”) por el que ascendían y descendían las vagonetas, para ser descargadas en este segundo nivel en un ferrocarril que transportaría el carbón hasta el cargadero de un cable aéreo, para trasladarlo finalmente hasta el pozo San Mamés, tras sobrevolar el río Nalón.
Tras cerrarse la mina, en 1965, se instaló en su bocamina un potente ventilador subsidiario del pozo San Mamés, montándose años después otro, mucho más potente y moderno.
Recientemente se han rehabilitado en parte algunos elementos mineros de este primer piso: pintado y restaurado el ventilador vertical, ajardinado la plataforma superior de la bocamina y adecentado el gran bloque de hormigón que se construyó en su momento para que hiciese de muro de contención ante accidentales descarrilamientos de las vagonetas del transportador. Lamentablemente, el conjunto comienza a presentar graves síntomas de deterioro, que de no remediarse, pronto le devolverán el mismo aspecto de abandono que tenía antes de la restauración.