Este antiguo pozo, situado junto al cementerio de la parroquia de Barros fue profundizado a finales de 1914 por los hermanos Felgueroso, entrando en servicio en 1919. Dispuso de un castillete de madera accionado por una máquina de vapor, siendo circular la caña del pozo, de 4 metros de diámetro.
De su única planta partía una galería hacia el norte, de la que arrancaba otra en dirección noroeste. Contó, además, con un socavón de 150 metros, próximo al pozo, con el que estaba comunicado a efectos de ventilación, y a unos 200 metros de este existía una bocamina conocida como la mina El Chelo.
A comienzos de 1920, la Sociedad Felgueroso Hermanos decidió integrarse en Duro Felguera, quien mantuvo parada la explotación hasta que se determinó su cierre, en 1923.
Se conserva el edifico que ocupó la casa de máquinas, ahora vivienda particular, y la chimenea de la máquina de vapor, de unos 15 m.