Dos son los castilletes que aún se mantienen en pie en Minas de Herrerías, en sus emplazamientos primitivos: el del pozo Guadiana y el del pozo San Carlos, ambos situados en la zona conocida como Guadiana, donde también se encuentra la corta a cielo abierto. El castillete del pozo maestro de la mina Cabezas del Pasto (construido entre 1860 y 1863), se rehabilitó en 2011 y se instaló en el casco urbano de Minas de Herrerías.
Los terrenos de la zona están constituidos por pizarras cupríferas, que fueron recuperadas a partir de 1945 por la Sociedad Minera del Guadiana, extrayéndose pequeñas cantidades a partir del siguiente año con el auxilio de un skip instalado en el viejo pozo maestro.
Este sector del yacimiento fue el último que se explotó, paralizándose los trabajos en 1990 al no encontrarse empresas interesadas en sus piritas. Los estudios efectuados a mediados de los años 90 (geofísica, sondeos, etc.) no consiguieron localizar masas mineralizadas cuya explotación fuese rentable.
Minas de Las Herrerías: Pozo Guadiana
Vista desde el pozo San Carlos (Fot. J.M. Sanchis, 2017)
AccederEl castillete del pozo Guadiana, montado en 1953, se construyó con perfiles de hierro roblonados, y se encuentra emplazado en un basamento elevado de hormigón sobre el brocal del pozo, de 250 m de profundidad. Las poleas, que medían 1,86 m de diámetro han desaparecido, al igual que la máquina de extracción, que era de dos tambores movidos por un motor asíncrono de 160 CV y 975 r.p.m. El edificio que la albergó y el resto de construcciones auxiliares se encuentran casi totalmente derruidos.