El Ayuntamiento de Siero (Asturias) ha editado un pequeño librito de 25 páginas bajo el título de Ruta Minera de Jovellanos, de elegante y esmerada presentación.
Eso está muy bien.
Lo que ya no es de recibo es que confundan los castilletes del pozo Pumarabule con los de la mina de Lieres, que explotó Solvay primero, y HUNOSA, como pozo Siero, después.
Se supone que el folleto se ha confeccionado y se reparte gratuitamente con la intención de informar sobre aquella ruta minera, y ese error de bulto no contribuye a ello precisamente.
Y eso está muy mal, Siero.