Junto a la regata Zumeldi, cerca de su desembocadura en el río Bidasoa, se encuentra esta pequeña mina de cobre. Fue el ingeniero Serafín Baroja, padre de los conocidos Pío, Ricardo y Carmen Baroja, quien en 1878 demarcó esta mina bajo el nombre de “La Esperanza” (nº expediente 98), aunque en posteriores denuncios (1902) se modificaría su nombre a “Esperanza” (nº 1167), esta vez para el beneficio de hierro.
En la actualidad se conserva una galería de escaso desarrollo y el horno de la mina en estado ruinoso. Junto a la bocamina surgen dos galerías: una principal de dirección N12ºE que aproximadamente a una treintena de metros se obstruye, y una segunda galería hacia N315ºE, más sinuosa, que acaba en roca tras una distancia similar.
La mineralización se presenta en forma de vetas de carbonatos y cuarzo con calcopirita y pirita, encajadas en pizarras carboníferas (facies “Culm” del Macizo de Cinco Villas). Se pueden observar también sulfuros secundarios y carbonatos de cobre, y bonitos espeleotemas de colores verdes, azules y anaranjados.
Texto y fotos: Javier Lazcano, 2018.