Los orígenes de este grupo minero se remontan a 1830, cuando se presentan las primeras denuncias sobre carbón en la zona, efectuadas principalmente por la Real Compañía Asturiana de Minas de Carbón, Fábrica de Mieres y la Sociedad Hullera y Metalúrgica Asturiana. Hacia 1860, la sociedad Orueta e Ibrán poseía algunas concesiones en Villabona (Rafaela, Ricarda, Hallada, Voluntad, etc.), a las que posteriormente se añadirían otras en 1907 (Nueva Ricarda, Felisa, Voluntad 2ª o San Luis) y 1930 Prosperidad, Fortuna, Por si Vale y Retrasada). Todas ellas serían adquiridas en 1935 por Minas de Villabona salvo las del grupo Santo Firme que se compraron a Fábrica de Mieres en 1967. El grupo Cárcaba, muy próximo a la estación de ferrocarril de Villabona, se encontraba en el sector oriental del yacimiento, y desapareció al emplearse como depósito de estériles procedentes del lavado de la fluorita.
Grupo Santo Firme y Cárcaba
Cortina de polvo surgiendo de una de las bocaminas de la mina (Fot. E. Pérez, 2018)
AccederAl parecer, en el último tercio del siglo XIX, una compañía francesa se había dedicado también al beneficio de las capas carboníferas de aquella zona a través del Socavón Schulz, de 800 metros de longitud y el socavón del Peñón, conocido como La Minona.
La extracción de carbón se mantuvo, de manera irregular hasta 1966, fecha en la que se abandonaron las labores, quedando las más profundas en la planta -130, donde se beneficiaban las capas Vena Nueva, Alemanes, Reguerón, Nobleza, Venuca, Águila 2ª, 3ª y 4ª, etc.
Grupo Santo Firme y Cárcaba
Conjunto de edificaciones de ladrillo de la mina Santo Firme (Fot. J.M. Sanchis, 2018)
AccederA partir de aquella fecha, Minas de Villabona procedió a cambiar las concesiones Ricarda y otras de hulla por espato flúor, aunque simultáneamente se fueron recuperaron los macizos de carbón no explotados. En 1982, y para diferenciar las actividades de extracción de carbón y fluorita, se constituyó la sociedad Espato de Villabona, S.A., como filial de Minas de Villabona.
Hasta 1985, fecha en que quedaron estos totalmente agotados por encima de la 4ª planta, se extrajeron 120.000 toneladas de hulla. El castillete del pozo San Ismael, inaugurado en mayo de 1975, se dedicó exclusivamente a la extracción del espato flúor.
