A algo menos de 500 m al E de las Salinas de Montejícar, en la zona SSW del Cerro de la Higuera, aparecen excelentes cuarzos moriones biterminados con las caras de prisma muy poco desarrolladas, lo que les da un característico aspecto bipiramidal. Aparecen entre las margas y yesos del Trias en facies Keuper característico del entorno del Cortijo Cañadas, en el N del término municipal de Montejícar, muy próximos al límite municipal de su vecino término de Huelma.
La fotografía ha sido realizada por Carlos Pareja sobre un ejemplar conservado en la Colección J.M. Iglesias.
La mina se encuentra situada muy próxima al antiguo caserío de La Esperanza, al S.E. del Cabezo Rajado, junto a la carretera N-332. Fue registrada en 1872 por Bartolomé Spottorno, recibiendo entonces el nº 3348. A sus 16 Ha primeras se le irían sumando varias Demasías (números 7561, 9689 y 9017) en los años 1880, 1882 y 1888. Tuvo como minas colindantes a Asunción, Gertrudis, Virgen de los Ángeles, El Ángel y Dolores. Posteriormente paso a ser propiedad de la S. Unión Española de Explosivos, y de la S.M.M. de Peñarroya, caducando la concesión en 1996.
La mina Los Burros presenta una peculiaridad que la hace única en la Sierra: su casa de máquinas tiene dos alturas. En los muros interiores se podían leer grafitis realizados por los antiguos trabajadores. Se conserva su cabria, de construcción típica de la zona, de madera de pino canadiense, con sus dos poleas, y sobre la caña del pozo, un carretón de carga de mineral. Este pozo recibió el nombre de San Bartolomé en honor del propietario de la explotación.
Mina Los Burros
Carretón de carga de mineral (Fot. J.M. Sanchis, 1998)
En diciembre de 2020, la Fundación Sierra Minera denunció el mal estado en que se encontraba la mina, con restos de quemas de enseres en su interior, desconchones, desperfectos y rayajos en las paredes que afectaban a las antiguas pintadas y el expolio de las piezas metálicas de anclaje de la maquinaria.
Los afloramientos volcánicos ultrapotásiccos (lamproíticos) del SE español, instalados durante el Neógeno, constituyen uno de los mejores ejemplos mundiales para el estudio de las lamproítas, tan escasas a nivel mundial. En la localidad que hoy nos ocupa, estas rocas volcánicas aflorantes se denominan jumillitas y se caracterizan por la presencia de olivino, diopsido y richterita, además de un buen número de especies entre las que destaca por su belleza el fluorapatito y otras especies más o menos exóticas de menor tamaño.
Minas Nuestra Señora del Carmen
Seudobrookita. Encuadre 2,5 mm (Col. y Fot. Joaquín García Flores)
Publicamos hoy 12 imágenes captadas por Joaquín García Flores sobre diversos ejemplares conservados en su colección particular. En ellas figuran, como especies protagonistas: baritina, fluorapatito, fluoro-richterita, seudobrookita, reichterita, sanidina, yuanfuliíta y un filosilicato del grupo de la esmectita.
Minas Nuestra Señora del Carmen
Fluorapatito. Encuadre 2 mm (Col. y Fot. Joaquín García Flores)
El Keuper en esta zona, correspondiente al relleno del diapiro de Estella junto a la localidad de Ayegui/Aiegi, se compone de yeso y brecha salífera, que incluye bloques grandes y pequeños de otras rocas, procedentes tanto del keuper como del techo y muro del mismo.
Cuarzos Prasio de Ayegui
Brecha detrítico-carbonatada con cuarzo prasio en algunos de sus cantos. Col. Museo de Ciencias Naturales de Álava MCNA 21525 (Fot. J. Alonso)
Los cuarzos prasio aparecen en uno de estos grandes bloques alóctonos o exóticos, el único de color ocre-anaranjado de cuantos se reconocen en la ladera. Su aspecto es de un conglomerado brechoideo de cantos angulosos levemente redondeados, inmersos en matriz carbonática del mismo color. Creemos se trata de carniolas infrajurásicas.
Cuarzos Prasio de Ayegui
Acumulación de cuarzos prasio rodados en matriz detrítico-carbonatada. Col. Museo de Ciencias Naturales de Álava MCNA 21526 (Fot. J. Alonso)
El yacimiento se encuentra en la base de una de las laderas que ascienden desde el SW hasta el mirador de Sarnabiaga, a algo menos de 250 m de este. Se accede desde la localidad de Ayegui/Aiegi desde la que dista unos 1000 m.
Figuramos hoy un bonito cristal de cuarzo de 3 cm, en matriz, procedente del barranco de Zanzano en término municipal de Cornago, una de las localidades clásicas riojanas para esta especie. El ejemplar ha sido fotografiado por Paco Mayor y se conserva en su colección particular.
La minería del agua en Canarias se inicia de manera sistemática en la segunda década del pasado siglo XX, habiéndose perforado desde entonces más de 1.690 galerías y cerca de 2.950 pozos para el beneficio de este valioso recurso mineral en estado líquido. Las galerías forman auténticos laboratorios de exploración de la hidrogeología insular y forman parte del patrimonio geológico y minero, del archipiélago.
Galería-Naciente Las Moscas
Vista general de la bocamina y entorno (Fot. Mar Alonso, 2022)
Nos remite Mar Alonso algunas imágenes de la bocamina-naciente 'Las Moscas' y de su entrono inmediato en el paraje conocido como Monte de Aguirre. Se encuentra a 870 m sobre el nivel del mar, a poco más de 1000 m al W del Mirador de Pico del Inglés. La galería, que presenta cierre, se encuentra inundada, Sale agua de la galería pero no se utiliza. Solo en el municipio de Santa Cruz de Tenerife hay censadas 53 galería y 30 pozos.
Se trata de una de las numerosas bocaminas presentes en este bello entorno del Parque Regional de Anaga, declarado en 2015 Reserva de la Biosfera por ser el lugar que cuenta con el mayor número de endemismos de toda Europa.
Figuramos hoy un tapiz de cristales octaédricos porosos de espinela, asociados a limonita, procedentes de los mármoles magnesianos blancos de la Sierra de Míjas, concretamente, de la mina Trinidad, en término municipal de Benalmádena junto al límite con el de Mijas. La fotografía ha sido realizada por Carlos Pareja sobre un ejemplar conservado en su colección particular, colectado en su día por Miguel Bedoya.
Esta mina, de una extensión de 9 Ha, se encuentra situada en el paraje conocido como La Cruz Chiquita, junto a la carretera N-345 (La Unión-Portman). Fue denunciada por Antonio Plaza en 1893, siéndole otorgado el número 11.645 de registro. Colindaba con las minas San Casimiro, San Fulgencio y Nelson.
Dispuso de un pequeño lavadero, que entre 1956 y 1965 trabajó la Empresa Minera Cruz Chiquita, S.L. Aún pueden verse, junto a la carretera, la tolva de almacenamiento de mineral, algunos edificios en ruinas, el brocal de mampostería del pozo y una bocamina que da acceso a la rampa por la que descendían los mineros al interior de las labores.
Mina Vicenta
Vista general del Centro de Interpretación con el castillete (Fot. J.M. Sanchis, 2016)
Sobre el pozo hubo instalado un singular castillete de extracción, de una sola polea, dada la estrechez de la caña del mismo. En el verano de 1997 fue desmontado y obsequiado al ayuntamiento palentino de Barruelo de Santullán, donde se encuentra actualmente emplazado en el Centro de Interpretación de la Minería.
Anteriormente a ello, el 29 de mayo de aquel año se había efectuado el hermanamiento entre los dos municipios. La donación causó un profundo malestar entre los vecinos de La Unión, que contemplaron con impotencia y rabia así la desaparición de un elemento extraordinario de su patrimonio minero.
Figuramos hoy varios ejemplares de ferrohornblenda (Ferro-hornblende), características del vulcanismo calcoalcalino aflorante en el almeriense término municipal de Carboneras. Los grandes fenocristales de ferrohornblenda aparecen con profusión en las brechas piroclásticas de dacita y andesíta anfibólica con texturas lávicas o tobaceas. Se han citado cristales de hasta 4 y 5 cm.
Ferrohornblenda de Carboneras
Ferrohornblenda. Pieza de 9 x 4,5 x 3,5 cm. Cristal de 2 cm. Col. Museo de Ciencias Naturales de Álava MCNA 00188 (Fot. J.M. Sanchis)
Aunque son abundantes los yacimientos con fenocristales de ferrohornblenda en este término municipal, aportamos en esta ocasión ejemplares procedentes de dos localidades clásicas: el yacimiento de la ladera occidental de la Cuesta de la Torre, junto a la carretera, en la salida norte de Carboneras hacia Mojácar; y el de la Playa del Algarrobico, este último con matrices más consistentes.
La fotografía superior ha sido realizada por Carlos Pareja sobre un ejemplar colectado en 2011 y conservado en su colección particular. La inferior fue realizada el siglo pasado por J.M. Sanchis sobre un ejemplar colectado antes de 1985 y conservado desde 1986 en el Museo de Ciencias Naturales de Álava con id MCNA 00188.
La minería del agua en Canarias se inicia de manera sistemática en la segunda década del pasado siglo XX, habiéndose perforado desde entonces más de 1.690 galerías y cerca de 2.950 pozos para el beneficio de este valioso recurso mineral en estado líquido. Las galerías forman auténticos laboratorios de exploración de la hidrogeología insular y forman parte del patrimonio geológico y minero, del archipiélago.
Galería-Naciente El Francés
Vista general de la bocamina y entorno (Fot. Mar Alonso, 2022)
Nos remite Mar Alonso algunas imágenes de la bocamina-naciente 'El Francés' y de su entorno inmediato en el paraje conocido como Monte de Aguirre. Se encuentra a 825 m sobre el nivel del mar, a poco más de 2000 m al NE del Mirador de Jardina. La galería, que presenta cierre, se encuentra inundada, siendo este agua aprovechada mediante una tubería metálica de 55 mm de diámetro. Solo en el municipio de Santa Cruz de Tenerife hay censadas 53 galería y 30 pozos.
Se trata de una de las numerosas bocaminas presentes en este bello entorno del Parque Regional de Anaga, declarado en 2015 Reserva de la Biosfera por ser el lugar que cuenta con el mayor número de endemismos de toda Europa.
Figuramos hoy dos ejemplares de cinabrio (Cinnabar) fotografiados por Carlos Pareja. Proceden de mina Las Cuevas, en término municipal de Almadén y se conservan en las colecciones de Carlos Pareja y Miguel Ángel Fernández Périz respectivamente.
Mina Las Cuevas
Cinabrio con cuarzo y pirita. Encuadre 4 mm. Col. Miguel Ángel Fernández Périz (Fot. Carlos Pareja)
Esta mina de tan extraño nombre se encuentra situada en el Cabezo de las Colmenas, en la Diputación de Alumbres (Cartagena), y colindaba con las minas La Carolina, Carolina la Doncella y Dos Amigos. Fue registrada con el número 2.016 en 1868 por Pedro Malvastre Cerdá, quien vendió a Juan Dorda Bofarull sus derechos un año después. Ocupaba una extensión de 5 Ha.
En 1905 pasó a pertenecer a la Sociedad Anónima Minera Antiguos Amigos, domiciliada en Cartagena y fundada el 8 de Abril de ese mismo año. En 1906 uno de los principales accionista de la Sociedad era el célebre empresario minero D. Miguel Zapata Hernández, quien transfirió sus acciones en 1913 a la Sociedad Miguel Zapata e Hijos. Posteriormente paso a pertenecer a la SMM Peñarroya, y finalmente a Portman Golf, S.A.
Se conservan, en ruinas, la casa de máquinas, el edificio de oficinas, el polvorín y los restos de un pequeño lavadero.
Figuramos en esta ocasión un ejemplar de prehnita procedente de la localidad española más atractiva para esta especie. Los cristales aparecían tapizando las paredes de numerosas grietas en las diabasas del Cerro de las Culebras, a poco más de 2 km del pueblo de Carchelejo, en término municipal de Cárcheles. El cerro fue beneficiado bajo concesión Guadalbullón, a nombre de Ofitas Carmona u Oficarsa, denominación esta última con la que se popularizo la cantera de esta magnífica localidad. Cesó su actividad en 2005.
Cantera Oficarsa
Cristales de diópsido en prehnita. Tamaño del ejemplar 26 x 24 x 17 mm (Col. y Fot. Carlos Pareja)
En la imagen de hoy observamos un agregado subparalelo de cristales de prehnita curvados en disposición helicoidal. Todo el conjunto aparece interpenetrado por un buen número de cristales prismáticos de diópsido. La fotografía ha sido captada por Carlos Pareja sobre un ejemplar conservado en su colección particular.
Esta mina de tan curioso nombre (denunciada en un principio como de hierro y posteriormente concedida como de plomo) estaba situada en la vertiente oeste del Cabezo de San Ginés (Llano del Beal). Con 12 hectáreas de extensión y una Demasía (126.400 m²), era colindante con las minas Alonso Ojeda, Josefa, Esperanza y Cortés. Fue demarcada por Ginés Navarro y Blas Martínez en 1866, recibiendo el número 72 de registro. En esta primera época trabajaban en ella un total de 30 hombres y cuatro malacates de tracción a sangre, produciendo unos 40.000 Qm anuales.
Mina Marquesita Moderna
Vista general del monumento (Fot. J.M. Sanchis, 1993)
Tras caducar la concesión, fue nuevamente registrada en 1882 por Guillermo Ehlers Meyer con el nº 8854. El 1902 se añadiría una Demasía (nº 16042). La mina sería trabajada mediante arriendos en años diversos por Manuel Cremades (1953) y Manuel Martínez (1963).
Su cabria, de madera de pino y hierro, se trasladaría a finales de los años 80 hasta la plaza Asensio Sáez de La Unión, donde quedó instalada como simbólico monumento de la actividad minera en la Sierra de Cartagena. En el año 2020 hubo de ser restaurado con urgencia dado el mal estado que presentaba la madera del pequeño castillete, atacado por insectos xilófagos.
Figuramos hoy dos ejemplares procedentes del filón Perseverancia (o filón Vera-Vértice) beneficiado en el Cerro del Vértice (o Cerro del Toril) por la empresa Unión Minera del Sur S.A. para la obtención de fluorita, en las década de los 70-80 del pasado siglo XX. La gran trinchera de la Corta Vértice (no confundir con la cantera El Vértice, en el mismo cerro) presenta acceso a numerosas galerías, algunas de gran sección y tremendamente peligrosas por sus continuos desprendimientos.
Corta Vértice
Cuarzo sobre cuarzo. Ejemplar de 38 x 32 x 20 mm (Col. y Fot. Carlos Pareja)
En la foto superior de esta entrada vemos dos generaciones de cuarzo. Los cristales facetados de color amarillo son huecos en su interior y se disponen sobre un cristal mayor de cuarzo ahumado de excelente color y brillo. El ejemplar fue colectado por Francisco Moreno en 1992.
Corta Vértice
Fluorita y cuarzo var. amatista. Encuadre 8 mm (Col. y Fot. Carlos Pareja)
En la foto inferior, sobre estas líneas, observamos un bonito grupo de cristales de fluorita con vértices y aristas levemente coloreadas, acompañados por un buen grupo de cristales de cuarzo var. amatista con ausencia casi absoluta de caras de prisma. Este ejemplar fue colectado por Jose Luis Valdés en 2010.
Ambas fotografías han sido realizadas por Carlos pareja sobre dos ejemplares conservados hoy en su colección particular.
Este es el título del nuevo libro de Arturo Pérez Reverte recientemente publicado. En él se narran las aventuras de un joven ingeniero de minas español llegado a México en plena revolución. El autor había escuchado a su familia la historia de un amigo de su bisabuelo, llamado Martin Garret Ortiz, contratado para trabajar en las minas de Piedra Chiquita (cerca de Ciudad Juárez, en el estado de Chihuahua), pero que entonces permanecían provisionalmente cerradas dada la inseguridad política del país. Mientras esperaba en un hotel el momento de incorporarse a su trabajo en la mina, escuchó un disparo, y bajó hasta la calle para informarse del suceso. A partir de este momento, su vida cambiará para siempre.
Así se inicia la historia que gira en torno a “un hombre, tres mujeres, una revolución y un tesoro”. Una entretenida novela tras la que se oculta gran parte de la biografía de juventud del autor.
Nos remite Enrique Ortiz de Zárate una nueva fotografía captada en el interior de una pequeña vacuala de las lamproítas del volcán de La Aljorra. Observamos un grupo de cristales tabulares y contorno hexagonal de hematites, de intenso color azul metálico producido por la difracción de la luz. Les acompañan algunos cristales de enstatita y otros propios de la paragénesis típica de estas rocas ultrapotásicas. El ejemplar fotografiado se conserva en el Museo de Ciencias Naturales de Álava con id MCNA 21459.
La historia del Grupo Socavón la inició José Amézola en 1906, extrayendo carbón en una zona en la que ya existían diversas bocaminas, en el paraje conocido como Candelaria. En 1940 las labores fueron arrendadas a dos particulares, y en 1951 el Grupo pasaría definitivamente a manos de la Hullera Vasco-Leonesa.
En 1948, tras la apertura del Socavón General, se iniciaría el laboreo de un nuevo campo de explotación, procediéndose a la guía sobre la capa Candelaria y a la capa Segunda. Entre 1963 y 1965, en una zona llamada Campareto, se perforó el pozo Amézola, de 171 m de profundidad, cuyo nombre se debe al que fuera primer presidente de la Hullera Vasco-Leonesa, José Amézola y Viriga. En un principio, su finalidad fue la de la explotación de los pisos cuarto y quinto. El pozo estaba dividido en tres plantas, y la última de ellas comunicaba directamente con el Socavón General. Desde este pozo se iniciarían, a partir de 1985, los trabajos de extracción en las distintas capas de la Formación Pastora.
Grupo Socavón: Pozo Amézola
El castillete, poco antes de ser derribado (Fot. Fco. Sahelices, 2010)
Su castillete (ya desaparecido) tenía una altura de 19 m y un peso de 42 toneladas. En 1976 se levantarían la casa de aseos, las oficinas y diversos talleres. El pozo contaba con 8.200 m de galerías y dos pozos inclinados de 38 grados mediante los que se explotó la capa Ocho. El método de trabajo fue el de plantas descendentes horizontales con sutiraje. En 1993, el Grupo produciría más de 200.000 toneladas de carbón, trabajando en él 127 mineros. En 1999, todo el personal del Grupo fue trasladado a la Nueva Mina de la HVL, cerrándose el grupo definitivamente. El castillete desapareció al poco tiempo debido al avance de las labores a cielo abierto de la nueva explotación.
Figuramos hoy una wulfenita (Wulfenite) procedente de las labores de interior de la mina de molibdeno San Antonio de Padua, en el Cerro del Chupa, colectada por Ángel Fernández Périz en 1990. La wulfenita se presenta aquí como agregados de cristales tabulares (a veces como laminillas) amarillos o anaranjados de hasta 5 mm de arista. Este ejemplar ha sido fotografiada por Carlos Pareja y se conserva en su colección particular.
